Seguir explorando es el camino de la seguridad energética

Una de las principales conclusiones del Congreso de Naturgas es que el país no puede darse el lujo de no firmar nuevos contratos de exploración y producción de hidrocarburos. Frente al descenso en las reservas de gas y petróleo, la seguridad y la soberanía energéticas están en juego.

Por: MARTÍN ROSAS

Hay un viejo chiste según el cual, ante las constantes quejas de la demanda por la escasez de oferta de gas natural en el país, los yacimientos siempre afloraban en el Congreso de Naturgas. Pero en esta ocasión ocurrió lo contrario.

Efectivamente, en el Congreso del sector, realizado recientemente en Barranquilla, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) reportó que las reservas de gas natural cayeron a su nivel más bajo de los últimos 17 años: 2,82 terapiés cúbicos (Tpc), que, al ritmo actual de consumo, alcanzarían para 7,2 años. Esto es particularmente grave, pues la demanda ha permanecido estable en los últimos siete años.

Frente a los resultados del informe de reservas, el exministro Amylkar Acosta señaló que este “no mueve al optimismo sino a la preocupación, pues el horizonte de autosuficiencia se reduce. El vaso se está vaciando, las reservas son precarias y para encontrar producto hay que explorar.”

Ante el cierre definitivo de la opción de yacimientos no convencionales en el Magdalena Medio, las perspectivas de adicionar reservas apuntan al offshore en aguas del Caribe, pero poner esas moléculas en superficie, de ser viables comercialmente, tardaría hasta finales de la década, mientras se estima que hacia el 2026 comenzaría a haber una estrechez en la oferta del energético.

Por eso, los diferentes actores que acudieron al Congreso de Naturgas coincidieron en que hay que reactivar los contratos de exploración y producción. “Colombia no se puede dar el lujo de no firmar nuevos contratos”, sentenció Acosta.

Por su parte, Francisco José Lloreda, presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo y Gas (ACP), frente a los resultados el informe señaló: “Creería que tanto la ministra de Energía como el presidente de Ecopetrol y el ministro de Hacienda deberían analizar con mucho cuidado este informe de reservas y reconsiderar la política… Si no se toman decisiones de fondo, lo que es claro es que en diez años, de manera gradual, vamos a estar importando gas y petróleo, más costosos por supuesto, y esto va afectar a los más pobres en Colombia.”

Y es que, pese a las evidencias y ante un fenómeno de El Niño que se espera llegue en el segundo semestre de 2023, la ministra de Minas y Energía Irene Vélez reiteró en Barranquilla que el gobierno se mantiene en no firmar nuevos contratos de exploración de hidrocarburos, y que le siguen apostando a la eficiencia de los actuales contratos, especialmente a través del recobro mejorado, que pasó del 21 al 23 por ciento en el último año.

“El recobro es una técnica muy importante, Colombia la ha venido utilizando y hay un incremento en la misma, pero claramente el recobro mejorado no es la única respuesta si queremos realmente tener seguridad energética a mediano y largo plazo”, opinó Lloreda.

Del lado de la demanda, Alejandro Castañeda, director Ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (ANDEG), dijo que “siendo la generación térmica el mayor consumidor de gas del país (entre el 20% y el 25%) se recibe el informe como una señal de incertidumbre y con preocupación, porque lo que ha venido pasando con las térmicas es que cada vez conseguimos menos gas nacional, por eso desde hace 5, 6 años venimos importando gas a través de la planta de Cartagena, y esta no es la mejor situación, pues se está expuesto a los vaivenes del precio internacional.

“Lo que preocupa es que una relación reservas producción de 7,2 años está mostrando que vamos a tener complicaciones dentro de 3 o 4 años, no solamente los térmicos vamos a estar importando gas sino otros componentes de la demanda, yo creo que sí amerita una revisión de fondo la posición por parte del gobierno y se debería continuar con la firma de nuevos contratos y darle continuidad a la exploración y producción en el país.”

Un golpe a la política del gobierno

Otro de los actores que se mostró preocupado fue el senador José David Name, quien señaló que “el informe nos muestra una realidad que no podemos ocultar en el país: necesitamos explorar, necesitamos nuevos contratos y hacerlo ya, porque de lo que se haga hoy, de la ronda que se haga próximamente, los resultados se van a ver reflejados en cuatro o cinco años, no quiere decir que cuando uno entrega un contrato inmediatamente va a dar resultados.

“Lo que pasó en el suroccidente del país con el tema del gas nos muestra que tenemos que ser autosuficientes, que nuestra seguridad energética no se la podemos dar a ningún país, que ese programa de importar gas de Venezuela o de cualquier otro país puede ser un complemento, pero Colombia no puede depender, que tenemos que seguir manteniendo nuestra autonomía en gas y petróleo, ese es el mensaje que nos deja el informe, solamente tenemos siete años de reservas y siete años están a la vuelta de la esquina.”

Acerca de la negativa del gobierno de firmar nuevos contratos de exploración, Name agregó que “esa no es la política correcta, además porque tampoco sale bien la transición energética. Enel acaba de decir que no va hacer el parque eólico en La Guajira, así que no están saliendo bien las cosas, y esa negación por parte de Enel a seguir con este proyecto por el chantaje de algunos avivatos en La Guajira, por las comunidades, le está dando un golpe muy fuerte a la política de este gobierno.”

Efectivamente, coincidiendo con el balance de reservas, Enel Green Power manifestó que cancelaba el proyecto de generación eólica Windpeshi en La Guajira, por los constantes bloqueos por parte de las comunidades indígenas, lo cual le da un golpe a la política de transición energética del gobierno.

En ese sentido, el senador Name llamó al gobierno a que saque adelante los proyectos de energías renovables de La Guajira. “Ellos no nos van a remplazar la energía que necesitamos, pero sí nos va a diversificar la matriz energética; necesitamos que la ministra y el presidente se encarguen de hacerles entender a esas comunidades que esa es la política de este gobierno por los próximos tres años que faltan, tienen que mandar un mensaje claro a los mercados internacionales para que regrese la inversión al país, para que podamos tener nuevos contratos de exploración de gas y petróleo. Hay que trabajar muy duro para que saquemos ese gas y ese petróleo que están enterrados en nuestro territorio”.

Finalmente, Luz Stella Murgas, presidente de Naturgas dijo que “para desarrollar el potencial de gas natural con que cuenta Colombia, la única manera es acelerando y expandiendo la actividad exploratoria.

“La emergencia que vivió el suroccidente del país lo que hace es ratificar que el gas natural es energía vital para todos los colombianos. Mantener la seguridad energética y la autosuficiencia de gas natural desarrollando el potencial, resulta ser esencial para poder cerrar brechas de desigualdad, incluso en aquellos hogares que todavía no tienen un energético para suplir sus necesidades básicas.” 

Las reservas de gas natural, pues, ya no son un chiste; las alarmas están encendidas.