El chu-chu-chu está llegando al sector energético. Las deudas acumuladas por la opción tarifaria, los subsidios y el no pago de algunas entidades del Estado, están llevando al país a un ‘apagón financiero’.
Aunque las recientes tres subastas de reconfiguración de energía permitirán sortean la estrechez entre la oferta y la demanda de energía de aquí al 2028, un ‘apagón financiero’ podría presentarse a finales de 2025.
“Eventualmente, en el tercer trimestre ya no aguantamos más”, dijo Alejandro Castañeda, director Ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (ANDEG), refiriéndose a las deudas de las distribuidoras que tienen en aprietos financieros a las generadoras.

Y es que las deudas de las distribuidoras con las empresas que les venden la energía ascienden a 3,1 billones de pesos, de los cuales $900 mil millones corresponden a la intervenida Aire-e con el parque térmico.
“Los agentes térmicos tienen que salir a comprar combustibles para prender sus plantas, pero seguimos en la misma situación, la Superintendencia de Servicios Públicos no toma ninguna decisión (refiriéndose a Air-e), no hace ninguna medida, no llama a acuerdos de pago, y el problema es que los bancos ya no están aguantando más y en cualquier momento nos cortan los créditos a los generadores de energía eléctrica”, dijo Castañeda.
Y agregó que “el superintendente de Servicios Públicos no toma ninguna decisión y nos tiene parados desde hace más de seis meses, ese el gran problema: el superintendente es el que tiene la responsabilidad de conseguir los recursos para nutrir a Air-e”.
Castañeda dijo que en la medida que no tengan como comprar combustibles, gas natural o carbón, eventualmente en agosto o septiembre alguna generadora cortaría el suministro de energía a las distribuidoras, provocando así el llamado ‘apagón financiero’.