Gracias a la gestión de Calamarí LNG, comercializador de la planta de regasificación de Cartagena, durante lo corrido de 2020 se han recibido cuatro cargamentos de GNL procedentes de Sabine Pass (Golfo de México) y Trinidad y Tobago.
26 de febrero de 2020. En lo corrido del presente año, Calamarí LNG ha importado 167.000 metros cúbico de gas natural licuado (GNL) que han llegado al país en cuatro cargamentos. Se espera que en los próximos días arribe un quinto barco para así completar los 170.000 m3 de capacidad total de almacenamiento con que cuenta la planta de regasificación de SPEC, ubicada en Cartagena.
Dichas importaciones de gas se vienen realizando con el fin de suplir la demanda de este combustible que requieren las termoeléctricas Tebsa, Termocandelaria y Termoflores, para dar respaldo a la generación y suministro de energía eléctrica, particularmente en estos momentos donde se requiere la oportuna respuesta de las plantas térmicas por los bajos niveles de los embalses para la generación hidráulica.
“Desde Calamarí LNG hemos adelantado las gestiones necesarias en estos dos primeros meses del año para asegurar el combustible requerido para que estas tres plantas brinden oportunamente la confiabilidad que el sistema eléctrico nacional requiere”, dijo Alfredo Chamat Barrios, gerente General de Calamarí LNG.
El GNL importado durante 2020 fue adquirido a jugadores internacionales como Shell y Naturgy, quienes lo despacharon a Colombia desde Sabine Pass en el Golfo de México y Trinidad y Tobago, dos centros de abastecimiento de gran dinámica en el Caribe.
“Calamarí se sigue consolidando en el mercado, contribuyendo al abastecimiento oportuno de gas nacional importado a las tres principales térmicas de la Costa Atlántica. Desde que iniciamos operaciones como el comercializador de GNL importado, hemos suministrado 18.000.000 MBTU, con lo cual las plantas térmicas han generado del orden de 2.000 Gigawatios hora de energía. Creemos que en el presente año habrá una dinámica de mayores operaciones de importación”, concluyó Chamat.