- Sendos estudios realizados por la industria del gas natural en Colombia revelan que el GNV es más competitivo frente a los combustibles fósiles y a los buses eléctricos.
3 de abril de 2019. La Asociación Colombiana de Gas Natural (Naturgas) reveló el más reciente estudio realizado por la industria para analizar la competitividad de los diferentes combustibles para el transporte urbano.
“El gas natural es el energético limpio más competitivo para las necesidades de movilidad. Los últimos datos arrojan que la competitividad del gas natural vehicular (GNV) mejorará con relación a la situación actual, por el aumento en los precios del crudo y la disponibilidad del gas natural local”, afirmó Orlando Cabrales Segovia, presidente de Naturgas.
El estudio “Construcción de un índice de competitividad para el GNV en Bogotá, Cartagena y Cali” fue realizado por las compañías PROMIGAS, GDO y VANTI para comparar el precio del gas natural con el precio de los derivados del petróleo en Colombia, mientras que el segundo estudio es un comparativo entre la movilidad eléctrica y a GNV en transporte público colectivo de pasajeros en áreas urbanas.
Ahorro en la tanqueada
Muchos usuarios de transporte público y privado se han pasado al GNV por sus beneficios económicos, ofreciendo ahorros de alrededor del 50% con relación a la gasolina y al 35% frente al diésel. En el caso de vehículos pesados, por ejemplo, un tractocamión con motor 100% dedicado a GNV representa ahorros superiores al 35 % en costos de combustible.
GNV vs transporte eléctrico
El gas natural es más barato que la alternativa eléctrica y tiene casi los mismos beneficios para la calidad del aire.
• Optar por flotas eléctricas implica elevar las tarifas del transporte público o destinar recursos adicionales de los presupuestos municipales para subsidiar el servicio.
• Migrar a flotas eléctricas implicaría elevar tarifas a los usuarios del transporte público en 309 pesos por viaje en bus, $151 en el caso del padrón y $207 para articulados.
• Además, los buses eléctricos aún presentan algunas barreras para su masificación en las grandes ciudades:
- Mayor costo de los vehículos.
- Menor flexibilidad operativa por restricciones de autonomía de la batería.
- Incertidumbre en la duración y costos de recambio y disposición final de la batería.
- Los medios reportan dificultades en el transporte público eléctrico en Indianapolis, Alburquerque y Los Ángeles.
- Falta de consolidación en la oferta y cadena de suministro (la tecnología comercial para los grandes fabricantes europeos aún se encuentra en desarrollo; las flotas de buses chinos llevan pocos años en circulación).
- Requiere la construcción de infraestructura especializada que puede ser muy demandante en recursos financieros y suelo urbano.
Fuente: Naturgas