El año pasado se incorporaron 1.587 unidades dedicadas, las cuales incluyen vehículos de pasajeros, camiones, tractocamiones y volquetas. En vehículos livianos, se convirtieron más de 16.000 unidades a GNV, con los que se alcanzaron los 639.000 vehículos convertidos en el país.
9 de febrero de 2022. La Asociación Colombiana de Gas Natural (Naturgas) reveló las cifras del crecimiento de la flota vehicular dedicada a este combustible durante el 2021.
De acuerdo con la agremiación, en lo que respecta a vehículos pesados dedicados a gas natural se incorporaron 1.587 vehículos, con los que se alcanzaron 4.061 y se incrementó la flota en un 64% con respecto al 2020.Las 4 referencias que más emplean esta tecnología son: buses (2.126), tractocamiones (606), biarticulados (563), y articulados (179).
«Este dato del crecimiento en la flota con gas natural vehicular (GNV) está totalmente alineado con las necesidades del país de mejorar la calidad del aire y luchar contra el cambio climático. El gas natural es una tecnología probada a nivel mundial, casos como los de Corea, con más de 30.000 buses; Estados Unidos, con 20.000 buses; y China, con 10.000, son una muestra que refleja la apuesta del mundo por la movilidad sostenible», destacó Luz Stella Murgas, presidente de Naturgas.
En cuanto a los vehículos livianos se convirtieron más de 16.000 transportes a gas natural vehicular, con los que se alcanzaron los 639.000 vehículos acumulados.Actualmente, existen 150 talleres autorizados en el país para la instalación de este sistema.
«Cálculos del sector estiman que, tanto en transporte público como en privado, la disminución en los costos por usar gas natural puede llegar a ser de hasta el 50% con relación a la gasolina, y de 35% frente al diésel», añadió Murgas.
El gas natural de cara a la salud pública
De acuerdo con el más reciente informe del Instituto Nacional de Salud (INS), en el plano nacional más de 15.600 muertes pueden ser atribuidas a enfermedades asociadas a la mala calidad del aire.
Se ha comprobado que el uso del GNV representa disminuciones cercanas al 100% del material particulado fino y del óxido de azufre. Así mismo, este reduce en alrededor del 75% las emisiones de óxidos de nitrógeno y en cerca del 30% al 50% del dióxido de carbono, en contraste con las generadas por un vehículo impulsado por diésel, según el modelo que se compare.